Practicad la respiración Sincronizada y la Recíproca en la posición del Yab Yumb como os enseñamos en la tercera entrega. Muchos amantes experimentan una conexión tan profunda con el otro que sienten una tristeza honda, amor absoluto que estalla en carcajadas o llanto. Es normal, son sentimientos que estaban bloqueados y ahora fluyen liberando de tensión emocional acumulada.
Hay un peligro que todo practicante de sexo tántrico debe tener en cuenta: comprender y controlar la energía no es sencillo. Una incorrecta canalización puede provocar problemas energéticos como confusión, mareos, dolores y ataques de ansiedad o pánico, por ello debes tener cuidado al realizar los ejercicios y no forzar ni saltar etapas, incluyendo los ejercicios de respiración.
Tras la estimulación de los sentidos con las caricias y la respiración, estaréis conectados y muy excitados, deseando pasar a la penetración. Como os dije, los practicantes avanzados del sexo tántrico que controlan bien su cuerpo, hacen los ejercicios en la posición del Yab Yumb con penetración incluida.
Es algo que haréis vosotros cuando tengáis más práctica.
Es muy excitante sentir el pene y la vagina unidos mientras se acaricia, besa y mira al otro sin mover la pelvis, pero nada sencillo ya que tendemos a mover la cadera y dejarnos llevar hasta el orgasmo. Es muy importante que intentéis mantener la penetración sin mover los cuerpos, simplemente sintiendo el sexo del otro dentro o alrededor. Puede que penséis que así bajará la erección. A veces baja pero, en general, se mantiene e incrementa ya que la excitación aumenta hasta niveles insospechados.
Balanceo en el Yab Yumb
Este ejercicio es muy intenso, permite conectar con la pareja a nivel emocional, físico y espiritual, y el placer sexual que se experimenta con él es muy elevado.
En la posición del Yab Yumb, introduce el pene en la vagina, estrechad el abrazo de los cuerpos y unid vuestras bocas. La clave de esta técnica es balancear los cuerpos como si estuvierais ejecutando una danza hipnótica en la que mirada, la respiración y los movimientos se sincronizan como si fuera un baile erótico.
Cuando el hombre exhale, ella debe inhalar; cuando ella exhale, él debe inhalar. Al inhalar, ella debe contraer los músculos vaginales y al exhalar relajarlos mientras se mece hacia atrás.
Te recomiendo que leas el artículo Técnicas para aprender a contraer la vagina. Uno de los mayores placeres que puedes experimentar es conseguir que tenga un orgasmo sin haber movido ni un solo músculo de su cuerpo, solo con las contracciones de tu vagina.
Controlar la eyaculación
Orgasmo, que no eyaculación. Ya os explicamos en el monográfico sobre el hombre multiorgásmico y en el Método Karezza que orgasmo y eyaculación no son lo mismo. La eyaculación debe evitarse lo máximo posible porque cuando un hombre eyacula, la energía es desperdiciada en el semen, pero si no eyacula, puede utilizarla trasmutándola en poder espiritual que asciende por la columna astral y activa los siete chakras de la conciencia, conectándolo con el todo. Llegar a tal grado requiere tiempo, paciencia, espiritualidad y la ayuda de un buen maestro.
Con este monográfico lo que pretendemos es que mejoréis vuestra vida sexual y, por lo tanto, emocional, arañando apenas la superficie del tantrismo. Por eso os hemos enseñado algunas técnicas en el día del dios para controlar la eyaculación todo lo posible que no son sino una pequeña muestra del kung-fu sexual (recordad que Kung-Fu significa Práctica).
No te obsesiones con controlar la eyaculación pero tampoco te dejes llevar a la primera de cambio. Disfruta de la experiencia con tu amante y cuando sientas que te acercas al punto de no retorno parad hasta recuperar el control. Tu respiración y la ayuda de tu pareja para disminuir la excitación (tirando suavemente de tus testículos, por ejemplo) son claves para lograrlo.
Algunos expertos en sexo tántrico recomiendan seguir seis pasos que puedes memorizar con alguna regla nemotécnica: Relajación. Conciencia. Medición. Propio Ritmo. Circulación de la Energía. Montar la Ola.
Relajación
Es la base de las técnicas tántricas para controlar la eyaculación. Crear ese espacio inviolable en tu interior libre de interferencias internas y externas. Controlar tu mente para que ella no te controle. Aprender a dominarla eliminando la tensión y los pensamientos inconexos, y así tomar plena conciencia de tu cuerpo.
Conciencia
La apertura de tu conciencia te permitirá estar concentrado en el momento actual, disfrutando plenamente de él con tu mente y sentidos abiertos. Sólo siendo plenamente consciente de tu cuerpo y el de tu pareja sabrás cuando llega el momento en el que te acercas al punto de no retorno y a ella le ocurrirá igual; de este modo identificarás las fases de tu excitación y la excitación del otro y aprenderás a controlarlas.
Medición
No confundas consciencia con concentración racional, sino con estar presente en cada cosa que vives, permitir a tu cuerpo sentir sin que la mente tome las riendas de la situación. Las caricias para estimular los sentidos de la entrega anterior cumplen este propósito. Una vez que seas consciente podrás medir tu excitación; las cosas que nos excitan no son siempre las mismas ni tampoco el tiempo que tardamos en llegar a la fase meseta. Si eres capaz de medir tu excitación no serás esclavo de ella.
Ritmo
Si cambias tu manera de ver el sexo, no te resultará difícil llevar un ritmo lento y pausado. El objetivo no es el orgasmo, ese es el fin del camino. Lo importante es disfrutar de éste. Degustar un plato delicioso, no engullirlo como el que termina un chupito de un trago. Si disfrutas del sexo no querrás que acabe nunca y tú mismo reducirás el ritmo paladeando cada instante. Llegará un momento en el que estarás muy cerca de la fase de no retorno pero aprenderás a controlarlo de manera que la roces pero sin caer en ella, como caminar por el borde una cornisa.
Circulación de la energía
Llámalo energía, llámalo deseo, tanto da, lo importante es visualizar que esa energía sexual, ese deseo, esa vibración que sacude tu sexo se aleje de él y recorra todo tu cuerpo para así, aumentar el placer y experimentarlo con todo tu cuerpo y no solo con el pene como os enseñamos en las técnicas para convertirse en un hombre multiorgásmico.
Montando la Ola
Este proceso de aumento de placer y los orgasmos sin eyaculación que se experimentan cuando se domina la técnica del multiorgasmo es lo que se denomina “Montar la ola”. El placer crece y crece en oleadas que suben cotas cada vez más altas. La excitación no sube y baja de repente como cuando eyaculas, sino que se mantiene y sube un grado más.
¿Qué hacer si tu pareja no quiere practicar sexo tántrico?
Si has llegado hasta aquí es porque deseas iniciarte en el sexo tántrico. Con suerte, tu pareja también deseará experimentarlo, pero no siempre ocurre así. Muchas personas son reacias a experimentarlo porque lo consideran algo místico, religioso o espiritual, sin base racional, casi sectario. No pensarían del mismo modo si supieran que el 90% de las técnicas sexuales que se venden como novedosas son lavados de cara del sexo tántrico para que los escépticos cedan. Se cambian las palabras energía por deseo o vibración, espiritual por psicológico o emocional, honrar al lingam por hacer una buena mamada o masturbación y la gente acude en masa a comprarse los libros con técnicas tan novedosas.
Si tu pareja pertenece a los escépticos, puedes explicarle con palabras desprovistas de espiritualidad en qué consiste el sexo tántrico, por qué deseas practicarlo, que no tenéis nada que perder y mucho que ganar con cosas tan sencillas como daros un baño juntos o un masaje cariñoso. Si aún así sigue costándole dar el paso, nada te impide a aplicar algunas de las técnicas que te hemos enseñado para mejorar tu experiencia sexual como controlar la eyaculación, pedir que te acaricie más, o meditar para desbloquear tu cuerpo de tensiones acumuladas. La relación sexual mejorará notablemente y lo advertirá, por lo que puede que se anime a experimentarlo… o puede que no. Sé paciente.
Una de las bases del sexo tántrico es el respeto al otro. No puedes forzar a tu pareja a practicarlo ni ella, claro está, a burlarse de ti. Pregúntale por qué se niega en redondo y prepárate para las excusas: miedo, excepticismo, falta de tiempo. Analiza las respuestas, quizá el problema sea más profundo de lo que consideras, especialmente si desde hace tiempo has advertido un distanciamiento emocional. Es un buen momento para ahondar en tu relación de pareja y preguntarte si es sana o necesita mejorar con terapia.
A veces las negativas a mejorar la vida sexual son un claro síntoma de degradación de la pareja, sobre todo si consideras que estas técnicas lo que buscan es conexión emocional y refuerzo del amor, no una práctica que pueda resultarle contraria a sus principios como, por ejemplo, alguna parafilia, sexo en grupo o intercambio de parejas.
Practica, practica, practica
Sólo practicando aprenderás y dominarás estas técnicas. Con el tiempo, si lo deseas podrás ahondar en ellas con un maestro en sexo tántrico. Si no, simplemente adáptalas a tus necesidades personales para mejorar tu vida sexual.
El sexo será una celebración, no un mero desahogo genital. Disfrutarás de él con todo tu cuerpo, tus células, tu mente, tus emociones. Aumentará la complicidad con el otro, la conexión, la comprensión, la comunicación, el respeto y el amor.
También aumentará la complicidad, conexión, comprensión, respeto y amor por ti mismo. Tomarás conciencia de tu vida y podrás vivirla intensamente.
Si aprendes a dominar tu mente en vez de estar dominado por ella, serás consciente de todo lo que te rodea y actuarás en consecuencia. Disfrutarás del camino y lo vivirás con plenitud.
Feliz viaje
"Fragile" - Stevie Wonder & Sting
1 comentario
Yo deseo hacer el sexo tamtrico se ve interesante