
Una encuesta reciente ha revelado que el Azul es el color favorito de los españoles. No debería extrañarnos, según la cromoterapia, el azul es un color relajante, que despeja la mente, combate el estrés, el insomnio, los miedos y…¡es tan bonito!. Es el color del mar, del cielo, de los ojos de Newman…
Aunque si una quiere acostarse con un hombre con unos ojos abrasadores, sean del color que sean, puede que unas braguitas de color azul no sean la mejor opción, porque a nivel psicológico es fresco, ligero, tranquilo y a nivel fisiológico, tranquiliza y apacigua, así que lo mismo te pones unas braguitas azules y tu pareja se queda roncando encima tuyo antes de empezar, como si no jodiera ya que se quede dormido en cuanto ha terminado.
¿Qué color de ropa interior es el más aconsejable si quieres asegurarte un polvo apasionado?. El Rojo.
Rojo pasión
Como os contamos en Una supervulva, dos estudios realizados por investigadores de la Universidad de Rochester (EEUU), por la Universidad de Trnava (Eslovaquia) y la Academia Eslovaca de Ciencias, publicado en la revista Personality and Social Psychology Bulletin reveló que las mujeres consideran a las que visten de rojo como rivales sexuales ya que parecen sexualmente más receptivas y más promiscuas y los hombres las consideran sexualmente más atrayentes, algo instintivo desde la época en la que éramos primates.
El rojo, según la cromoterapia, a nivel psicológico es enervante, caliente, dinámico; a nivel afectivo, es amor, pasión, alegría; a nivel fisiológico, es penetrante, estimulante y calorífico. ¿En qué se traduce eso? Que aumenta la energía, la agilidad, incrementa la circulación sanguínea estimula el corazón y calienta el cuerpo; por eso está especialmente indicado para los deportistas. Ideal para que el cuerpo se ponga como una moto y uno tenga ganas de una ginkaMa.
A nivel psicológico eleva la autoestima, facilita la toma de decisiones, estimula, sacude la pasividad y el decaimiento: vamos, que tienes un salto del tigre garantizado.
Aunque, cuidadito, que demasiado rojo puede hacer que la persona se muestre irritable, nerviosa e impaciente. Así que lo mismo se pone atacado y en vez de ser un maratón en un sprint. Y si encima es hipertenso, con eso de que incrementa la circulación sanguínea y estimula al corazón, le da un subidón, un fluki y se te queda tieso encima. Por no hablar de los hombres que temen a las mujeres apasionadas y prefieren tomar la iniciativa en la cama, a los que, probablemente, un tanga rojo les asuste y se arrugue su cosita.
Yo, por si acaso, braguitas azules; que el azul nos vuelve más generosos y solidarios y con suerte se anima a hacerme el cunnilingus de mi vida.
1 comentario
Una pregunta, que me dicen del saten y la seda?